Así pillé una infidelidad

¿Soy Celosa?

Si te gustan los cotilleos (chismes), lee atentamente porque te voy a contar algo que me pasó hace años con un ex.

Llevábamos unos meses viviendo juntos y en ese momento yo acababa de empezar a trabajar en una empresa en la que no me sentía para nada cómoda. 

Mi jefe me ponía muy nerviosa y sentía mucha presión.

Por las mañanas no tenía ningunas ganas de ir a trabajar, de hecho, en cuanto me iba acercando a la oficina con el coche se me iba revolviendo el estómago.

Por las mañanas, mi ex pareja solía salir de casa antes que yo para ir a su trabajo.

Un día cualquiera, ya vestida y arreglada para salir hacia la ofi, veo que encima de la mesa del salón están nuestros dos ordenadores portátiles, que eran exactamente iguales. El mismo modelo.

Como me tenía que llevar el mío al trabajo, los abrí para ver cuál de ellos era el mío.

Eran aproximadamente las 7 de la mañana.

Obviamente, seguía medio dormida y asimilando la vida cuando, de repente, aparece en la pantalla de su ordenador a la aplicación abierta de Gmail con una serie de correos subidos de tono con una chica. 

Con fotos incluidas.

Casi me desmayo. 

No lo podía creer.

Recuerdo que me empezaron a temblar las piernas.

Tenía ganas de vomitar. 

Se me cayó el mundo encima al pensar que durante semanas, mientras yo dormía, él se dedicaba a eso desde el salón.

Además, pensé: 

Si no llega a ser así, de casualidad, jamás me hubiera enterado porque nunca se me habría pasado por la cabeza revisar su correo.

Te podrás imaginar cómo fue ese caminito hacia el trabajo…

Hasta ese momento, yo siempre me había considerado una persona muy confiada. 

Nada celosa ni insegura. 

Pero esa situación rompió todos mis esquemas. 

Ese disgusto marcó un antes y un después en mis relaciones. 

Era incapaz de confiar. De poner la mano en el fuego por alguien.

Pero tampoco exteriorizaba esa sensación para no parecer débil o insegura. 

De hecho, no la aceptaba ni conmigo misma. 

Simplemente llevaba esa preocupación en silencio. 

Sentía que en cualquier momento me iban a herir de nuevo.

Hasta que un día hablé con mi madre.

Le confesé que no podía evitar vivir preocupada por si me engañaban otra vez, aunque no tuviera en ese momento ninguna razón para desconfiar. 

Me sentía constantemente preocupada por si estaba pasando algo de lo que yo no me estaba enterando.

Y mi madre me dijo: 

Mira, si te engañan, tarde o temprano va a salir. Además, vivir preocupada por si te engañan y que no te engañen nunca, seria muy triste porque vas a estar siendo infeliz sin sentido. Así que deja de anticiparte por algo que no ha pasado y vive el momento sabiendo que, si en el peor de los casos te engañan, lo superarás.

Durante mucho tiempo, en otras relaciones, hacia un esfuerzo enorme para poner en práctica esa filosofía.

Pero no terminaba de funcionar. 

Por mucho que lo intentara, no podía evitar desconfiar.

Hasta que, cuando decidí hacer un podcast sobre los celos, reflexioné sobre mi relación actual.

Y sin saber exactamente en qué momento esto cambió, me di cuenta de que, a día de hoy, no pienso nunca que mi pareja vaya a engañarme.

Ya no tengo ese miedo. 

Cero preocupación.

Me he dado cuenta de que no tengo que hacer ningún esfuerzo para confiar ni recordarme esas palabras de mi madre.

¿Por qué? ¿Qué es diferente ahora?

Por un lado, me siento mucho más segura de mí.

Tengo mucho más claro lo que quiero en mi vida después de muchas cosas que he vivido los últimos años y, si eso pasara, si me engañara, simplemente me estaría demostrando que no es el tipo de persona con el que quiero compartir mi vida.

Además, hace unos años hice las paces con mi vulnerabilidad.

Así que si en algún momento me siento insegura por algo, me doy la oportunidad de expresarlo y compartirlo para poder hacer algo al respecto.

Por otro lado, la inseguridad no sólo se genera por lo que pienso que mi pareja puede estar haciendo a escondidas. Sino por lo que me demuestra.

Entendí que mi desconfianza en otras relaciones no era solo por esa anécdota del pasado, sino que había otros vacíos en la relación que provocaban que esa inseguridad se activara.

Los celos no solo se activan cuando tu pareja habla demasiado con otra persona, o cuando pone el teléfono boca abajo, o cuando recibe un mensaje extraño. 

Esas alarmas se encienden también por actitudes del día a día. Por no sentirte completamente segura a su lado.

Si tu pareja no quiere pasar tiempo contigo, no te da tu espacio para expresar tus emociones, no hay conexión, sientes que no eres una prioridad o que no te tiene en cuenta en su día a día… es normal que tus alarmas se disparen.

Aunque no te dé razones específicas con terceras personas, si tú no tienes la plena certeza de que tu pareja quiere estar contigo, las sombras aparecen.

Sin embargo, cuando tu pareja te da tu lugar, quiere compartir planes contigo, gestionáis los retos como equipo, tenéis objetivos comunes, te demuestra su amor en el día a día y te trata como una prioridad en su vida, las desconfianzas tienden a ir disminuyendo hasta desaparecer, sin tener que hacer ningún esfuerzo para no pensar en cosas desagradables.

Muchas veces tratamos de trabajar en cosas importantes de las relaciones de forma individual, como si la otra persona no tuviera nada que ver y fuéramos nosotros los que tenemos algo ‘mal’.

Pero, si sientes desconfianza, ¿es un tema sólo de uno? 

Bueno, depende.

Seguramente haya inseguridades personales, pero también habría que analizar cuáles son los botones que activan esas alertas y cuáles son las dinámicas dentro de la relación.

A continuación te voy a dejar 5 preguntas que te van a ayudar a reflexionar sobre el tema y, seguidamente, te dejo el enlace al nuevo episodio del podcast en el que hablamos precisamente sobre este tema:

Los celos - El enemigo silencioso de las relaciones.

JOURNALING

La escritura terapéutica o también llamado Journaling ha sido y sigue siendo para mí el hábito de drenaje emocional más eficaz en mi día a día.

Por esa razón voy a compartir contigo semanalmente algunas ideas de preguntas y reflexiones que puedes hacer en tu ratito de conexión contigo.

Establece 15 minutos de reunión contigo. Ponte música relajante y escribe con la absoluta tranquilidad de que nadie más que tú va a leer esas palabras.

  1. ¿Te sientes plenamente valorado/a en tu relación de pareja?

  2. ¿Sientes que constantemente tienes que hacer un esfuerzo para justificarte que lo que tu pareja te ofrece es suficiente?

  3. ¿Sientes miedo o ansiedad por pensar que tu pareja pueda dejarte en cualquier momento?

  4. ¿Te da miedo expresar ciertas emociones o pensamientos por temor a que tu pareja reaccione mal o se aleje?

  5. ¿Qué tendría que cambiar en tu relación para que te sintieras plena confianza?

TIEMPO PARA MÍ

Te invito a escuchar este episodio del Podcast:

Celos - El enemigo silencioso de las relaciones

AVISOS IMPORTANTES

Si te interesa iniciar un proceso de acompañamiento individual, contacta conmigo para recibir toda la información.

Como siempre, muchas gracias por estar aquí. Te escribo el próximo miércoles.

Y recuerda que…

La calidad de tu vida depende de la historia que te cuentas sobre ti mismo.